Un estudio en ratones revela alteraciones en el esperma que se asocian a un comportamiento más ansioso en la siguiente generación.

martes, 21 de octubre de 2025

Un nuevo estudio científico publicado días atras sugiere que la infección por COVID-19 en ratones machos podría provocar alteraciones duraderas en futuras generaciones, al modificar su esperma de manera que aumentaría la ansiedad en su descendencia. La investigación, realizada por expertos del Instituto Florey de Neurociencia y Salud Mental en MelbourneAustralia, encontró que toda la descendencia de ratones machos infectados con el virus mostró comportamientos más ansiosos que aquellos con padres no infectados.

Para el estudio, los investigadores cruzaron ratones machos que habían sido infectados con hembras, evaluando la salud y el comportamiento de las crías. Elizabeth Kleeman, primera autora del estudio, detalló que se observaron «comportamientos más ansiosos» en la descendencia. Además, se detectaron «cambios significativos» en la actividad de ciertos genes en el hipocampo –la parte del cerebro que regula las emociones–, particularmente en las hembras. Este fenómeno se atribuye a alteraciones en moléculas de ARN en el esperma de los padres, lo que podría contribuir al aumento de la ansiedad en las crías a través de la herencia epigenética y un desarrollo cerebral alterado, según la coautora Carolina Gubert.

El estudio halló que toda la descendencia de padres infectados con covid exhibió esos mismos cambios. Las hembras, en particular, mostraron «cambios significativos» en la actividad de ciertos genes en el hipocampo, la parte del cerebro que regula las emociones.

Los autores señalan que, si estos hallazgos se confirman en humanos, «esto podría impactar a millones de niños en todo el mundo y a sus familias, con importantes implicaciones para la salud pública». El trabajo ha sido publicado en la revista científica Nature Communications.