Más de 100 mil electores escogieron no ir a votar el pasado 13 de agosto.

jueves, 24 de agosto de 2023

A pesar de que en Catamarca se eligieron candidatos a nueve estamentos y que la provincia optó por ser una de las pocas en no desdoblar su elección, el porcentaje de ausentismo fue alto y quedó quinta en el ranking nacional. En las pasadas PASO, no concurrió el 32,7% de los 327.528 electores registrados. Fueron 102.242 catamarqueños que desoyeron la convocatoria a las urnas.


En las últimas elecciones PASO presidenciales, la participación fue del 74,28% del padrón, es decir que un poco más del 25% del electorado no participó del acto electoral. El desinterés cívico en estos cuatros años creció más de un 7%.


El porcentaje es bastante considerable para que los equipos de campaña de las tres fuerzas preponderantes de Catamarca traten de dirigir un mensaje hacia los electores que no concurrieron.


En las elecciones de medio término de 2021 y en medio de la pandemia, las cifras de concurrencia fueron bastante positivas y a nivel nacional hubo un récord histórico de más del 80% de concurrencia. 


El ranking de ausentismo lo lidera la provincia Chaco, donde no fueron a las urnas 355.929 chaqueños (36%). Le sigue Salta, donde se sumaron 360.349 electores que no concurrieron (35,3%), en tercera posición está La Rioja, en donde 99.057 riojanos no participaron (casi un 34%), el cuarto lugar del ranking lo tiene misiones, con un total de 983.093 registrados en el padrón que no fueron a emitir su sufragio (33,7%) y el podio culmina con Formosa, con 476.466 personas habilitadas que no participaron del acto electoral (casi un 33%). En estas cuatro provincias solo se eligió cargos nacionales.


En el sexto puesto se encuentra Catamarca. Le siguen  Santa Fe (32,1%), Corrientes (31,2%), Santiago del Estero (31,7%), La Pampa (30,7%), Chubut (30,5%), Río Negro (30,5%) y San Luis (30,4%).


A nivel nacional, tres de cada 10 argentinos no fueron a votar. Son casi 10,5 millones de votantes que no se molestaron o no les interesó ir a la urnas. Este universo es el objetivo de las tres principales fuerzas políticas y hacia quienes direccionarán, a partir de ahora, sus estrategias electorales.


En las Primarias de 2019, la participación había sido del 76,4% y subió al 80,4% en las generales. Al mismo tiempo, el voto en blanco pasó de 3,4% al 1,6%. Si se repitiera esa tendencia, se sumarían 1,2 millones de votantes en las elecciones del 22 de octubre, una cifra que será definitoria por la cercanía en el volumen de votos obtenidos por cada una de las tres fuerzas que se disputarán la presidencia.