Rodrigo está internado en el hospital Rossi de La Plata y confirmó que su esposa recibió nueve disparos en la espalda

10 de Octubre de 2022

Un hincha de Gimnasia contó que está por perder un ojo

A cuatro días de los graves incidentes que se produjeron en las inmediaciones del estadio de Gimnasia en la previa al partido contra Boca Juniors, un fanático del Lobo contó que fue baleado por la policía en uno de sus ojos y que está a un paso de perder la visión según le indicaron los médicos del Hospital Rossi, donde está internado.

“Recibí un disparo en el ojo, estoy a punto de perder la visión por el tiro que me pegaron en la retina. Y no saben si lo voy a recuperar. Se me hizo un coágulo de sangre”, contó Rodrigo en un video que difundió el canal de noticias TN.

“Están viendo como me quedó la cara después de la represión de la policía”, agregó el fanático del Lobo, que luego de eso dio detalles de cómo se produjo el ataque por parte de las fuerzas policiales.

“Llegando a la cancha, 9.10, 9.15 de la noche, con carnet en mano, con mi hermana y mi señora, la policía ya estaba queriendo reprimir. Estaban los portones cerrados, algo que nunca sucedió. Y de un momento para otro, yo estaba adelante de todo. Y cuando la policía me empujó, me acribilló a cara de perro. Me pegaron un tiro en el ojo porque tenían ganas”, confesó.

“Así empezaron a reprimir. A mi señora le dieron 9 tiros en la espalda. Mi hermana me pierde y a raíz de todo me dieron un adoquinazo. Tengo triple fractura (se señala la zona inferior del ojo izquierdo), la mandíbula y lo del ojo. Lo único que quiero es que se haga cargo de todo la policía que estuvo ahí. Me arruinaron la vida”, agregó Rodrigo.

Ya en diálogo con los periodistas, el hincha de Gimnasia reiteró que es muy factible que pierda la visión de su ojo izquierdo. “Tengo el ojo muy comprometido. Tocó la retina. Se me hizo un coágulo donde está la retira, y al disparo ser tan cerca, me explotó por detrás. Yo, ahora, no veo”, explicó.

El público ingresó al campo de juego luego de que el gas lacrimógeno ingreso al estadio (REUTERS/Jose Brusco)El público ingresó al campo de juego luego de que el gas lacrimógeno ingreso al estadio (REUTERS/Jose Brusco)

Al ser consultado por la distancia desde donde el policía le gatilló, el simpatizante dijo: “Me disparó a un metro, metro y medio. Mi hermana me arrastró como 15 cuadras. Perdía sangre por la boca, por la nariz y por el ojo. Si me quedaba ahí me moría”.

Por último, Rodrigo contó que a la espera de conocer qué le dirán los médicos sobre el estado de su visión, esto le afectará de manera directa en su trabajo diario. “Hace 10 años que tengo transporte escolar. Me arruinaron la vida”, manifestó.

Hay que recordar que además de las varias personas que terminaron heridas, falleció un hincha del Lobo. César Regueiro, de 56 años, murió de un paro cardiorrespiratorio en medio de la represión policial que se ejerció en los ingresos de la cancha. Si bien el ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, dijo que tuvo una “muerte súbita”, la familia lo desmintió y apuntó contra la Policía.

“A mi hermano lo mató la represión policial. No es un tema de inseguridad, fue a ver un partido de fútbol como fue a ver toda la gente a la cancha. Mi hermano no muere porque la tribuna, el paravalanchas o las banderas de Gimnasia lo agredió. A mi hermano, y a las 25 mil personas que estaban en la cancha, las agredió la Policía de la Provincia de Buenos Aires”, afirmó Oscar Regueiro, hermano del Lolo, como lo conocían en la ciudad.